Los cursos de posgrado se dividen en dos grandes grupos, lato y estricto sensu. En este artículo explicaremos las principales diferencias entre ellos y posteriormente también explicaremos las subdivisiones existentes. Las principales diferencias están en la carga de trabajo, los objetivos de los estudiantes y las metodologías utilizadas.
Lato Sensu
Se trata de cursos que se centran mucho en el estudio de casos y aplicaciones en la vida diaria del profesional, ofrecidos generalmente como una forma de actualización y especialización en un tema determinado. Al estar mayormente enfocados al mercado, generalmente tienen una carga de trabajo más flexible, pudiendo tener un formato de reunión de fin de semana o semipresencial (donde hay una semana intensiva y semanas posteriores en remoto). Es más adecuado para profesionales que inician su carrera o que necesitan actualizarse sobre un tema específico.
MBA (Maestría en Administración de Empresas)
Es recomendado para profesionales que ya tienen algunos años en el mercado laboral, ya que el intercambio de experiencias entre estudiantes es una parte importante del programa. Generalmente, el público de este tipo de posgrados son personas que ocupan puestos de alta dirección o que desean prepararse para estos puestos. Combinando la red y la adquisición de know-how con las mejores prácticas en gestión de personas, negocios, proyectos y temas diversos en las áreas de administración, el estudiante se vuelve capaz de desempeñarse en puestos ejecutivos y de planificación, ya sea en el sector público o privado.
Especialización
Es un curso enfocado a reforzar conocimientos en un tema o área de actividad específica. A diferencia del MBA, por ejemplo, el público no necesariamente tiene una amplia experiencia en el mercado, y muchas veces se realiza inmediatamente después de finalizar la carrera y, por tanto, con un público generalmente más joven. La metodología permite a los estudiantes dominar diferentes enfoques, interpretaciones y resolución de problemas.
Estricto sentido
Existe la idea preconcebida de que quienes buscan un posgrado en Stricto Sensu solo tienen el deseo de enseñar, ya sea a tiempo parcial o completo, lo que de hecho ocurre en algunos casos. Además de estas personas, existen quienes buscan capacitarse para diferenciarse en el mercado, adquiriendo conocimientos y métodos para mejorar su desempeño profesional y facilitar la búsqueda de nuevos desafíos cuando sea necesario. Los posgrados Stricto Sensu señalan que el profesional es alguien comprometido y con criterio para desarrollar nuevos conocimientos, además de tener networking con personas de diferentes carreras y experiencias que complementan la suya, pudiendo así desarrollar nuevas ideas y conocimientos.
Las opciones de posgrado Stricto Sensu tienen como objetivo incentivar al estudiante a desarrollar ideas originales que amplíen la frontera del conocimiento en el área investigada. El objetivo es promover diferentes enfoques metodológicos y científicos, delineando así líneas de investigación con el más alto criterio científico.
En Stricto Sensu, las discusiones y análisis de conceptos, los diversos conocimientos de los estudiantes y las diferentes perspectivas sobre momentos históricos y teorías sirven como insumo para el desarrollo de nuevos enfoques y la creación de conocimiento.
Maestría Académica
El Máster más conocido es quizás el académico, muy asociado a profesionales que quieren enseñar. Pero no sólo este público se encuentra en este programa, muchas personas buscan esta maestría para convertirse en investigadores con mayor rigor científico o para desarrollar metodologías de investigación. La maestría académica ayuda a los profesionales, además de desarrollar habilidades relacionadas con la investigación, a conocer más sobre la andragogía para transmitir conocimientos.
Maestría profesional
A pesar de ser muy similar a la maestría académica, esta modalidad se diferencia por su alcance y metodología. Hay un enfoque mucho mayor en la aplicación del conocimiento académico en la vida profesional diaria del estudiante. De esta manera, al finalizar el curso, el estudiante tendrá una base teórica para aplicar sus conocimientos en el mercado laboral.
El objetivo es familiarizar al estudiante con las metodologías de investigación, pero no necesariamente continuar una carrera como investigador. Lo realmente importante es que este profesional tenga experiencia en investigación para que sepa ubicar dentro de un contexto científico temas que sean de interés para su profesión, de modo que pueda incluir conocimientos existentes y futuros en su trabajo. La creación del sentido crítico es un ejercicio no trivial, que requiere mucho esfuerzo y dedicación por parte del alumno para realizarse de forma científica.
Doctorado
El doctorado requiere un mayor nivel de madurez de ideas y sentido crítico, porque el curso requiere una defensa de tesis. El curso hace que el estudiante realmente amplíe la frontera del conocimiento, siendo evaluado por un panel altamente refinado y colocándolo en condiciones de juzgar ideas.
Aunque es común, no es necesario completar un doctorado después de una maestría u otro posgrado. Esto se debe principalmente a que la tesis doctoral es un tanto intimidante, requiriendo que el estudiante tenga un alto nivel de conocimiento en el desarrollo de nuevas ideas, producción académica, alto sentido crítico y experimentación en el acto de investigar. Por lo tanto, muchos estudiantes pasan primero por la maestría para “prepararse” para un doctorado, ya que la maestría promueve este conocimiento.
El mejor tipo de posgrado depende de tus objetivos profesionales. ¡Esperamos que este texto te haya ayudado a comprender mejor para que puedas tomar una decisión segura! Recuerda: un posgrado requiere planificación y compromiso. ¡Es una decisión que cambia tu futuro profesional!